No hay manera de olvidar nuestra relación con Reydi, que comenzó allá en la Perito Moreno de Godoy Cruz cuando el Darío me llevó a conocer la primera Reydi y solo con un saludo conocí al Enrique.
Después de eso vino una catarata de éxitos y crecimiento!
Lo que más rescato es la gran amistad que se creó entre nosotros.
No olvido mi viaje a Europa que gané a través del programa Reydi Bonus, ni tampoco sus tan añoradas fiestas de aniversario de la compañía.